Panamá pertenece al grupo de aquellos países de América Latina y el Caribe que empezaron a crear en los años noventa instituciones cuyo objetivo era desarrollar la ciencia, la tecnología y la innovación, motivados por la búsqueda de soluciones a los difíciles y novedosos problemas, como el desarrollo económico en un mundo globalizado y altamente tecnificado, los cambios en el ámbito del trabajo, la pobreza y la polarización socioeconómica.
En ese contexto se creó el organismo rector de las políticas de CTI en Panamá, la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (SENACYT), en 1997, y se elaboraron los planes nacionales de ciencia, tecnología e innovación en los años posteriores. El sistema nacional científico y tecnológico no contemplaba en sus primeras fases la necesidad de construir políticas especialmente orientadas a la igualdad de género.
Hasta el Plan de Acción para la Igualdad de Oportunidades para las Mujeres 2016-2019, en los planes de igualdad generados desde la institución ejecutora de la Ley 4 de Igualdad de Oportunidades, primero la Dirección Nacional de la Mujer y luego el Instituto Nacional de la Mujer, no se había incluido un eje sobre Ciencia, Tecnología e Innovación. El actual Plan de Acción pretende no solo complementar la propia política que desde el Instituto de la Mujer (INAMU) se elaboró en 2012, sino cumplir con lo dispuesto en el Plan Estratégico del Gobierno 2015-2019. Es importante señalar que en los planes anteriores del INAMU se contemplaba la necesidad de promover la igualdad en el uso de las TICs y luchar contra la brecha digital entre hombres y mujeres, pero no se consideraba la participación femenina en la Ciencia, la Tecnología y la Innovación.
La Comisión de Género de SENACYT elaboró, junto a consultoras externas, lo que se dispone sobre género y CTI con el Plan Nacional de Ciencia y Tecnología (PENCYT) 2010-2014. Fue en gran parte el interés de las funcionarias de SENACYT lo que hizo posible que en el plan se visibilizara el tema de género.
Ocurrió por primera vez una dichosa confluencia en el período 2010-2014 entre las políticas de CTI del INAMU y las políticas de igualdad de género en CTI en la SENACYT. Sin embargo, hay que recordar algunas circunstancias no tan alentadoras: la debilidad del INAMU, que afecta sobre todo a su autonomía económica; la fragilidad de la Comisión Técnica de Género de la SENACYT, poco institucionalizada; y la invisibilización del tema de género en el PENCYT 2015-2019 que, al aparecer como un tema transversal, queda diluido. Se puede concluir que existe un déficit entre los propósitos enunciados en las políticas y programas proyectados en ambas instituciones y la realidad de cómo se llevan a la práctica o no, es decir, la existencia de una importante brecha de implementación entre ambos.
Iniciativas implementadas por la SENACYT
- Premio L’Oréal UNESCO por las mujeres en la ciencia (2017 y 2018) para el fortalecimiento de jóvenes científicas.
- Campañas de comunicación sobre las mujeres en ciencia.
- Cafés científicos dedicados al tema mujeres y CTI
- “Mujeres pioneras en ciencia” para destacar a 10 mujeres científicas en Panamá.
- La oficina de Recursos Humanos tiene desagregados los datos del personal por sexo y edad.
- Encuesta para la construcción de un Centro de Orientación Infantil y Familiar (COIF) y la sala de lactancia: la sala de lactancia ya existe, el COIF se está preparando.